Leche condensada

Por casualidad este verano cayó en mis manos un bote de leche en polvo desnatada, con el que no sabía que hacer. Dándole vueltas y mirando por internet, descubrí que era la base para hacer la leche condensada. Muy excéptica, busqué entre casi todas las recetas que encontré y ninguna me convencía hasta que ví la del blog "Mis thermorecetas" que era la más sencilla.

Tengo que deciros que nada más hacerla que al ser la leche desnatada quedó muy líquida y no me convenció. La metí en la nevera y poco a poco vi cómo se iba espesando, hasta que cogió la textura, el sabor y el espesor, como las que compramos en el supermercado.

Así que se acabó el comprar los botes. Hice una cantidad pequeña para probar y como ya me ha convencido el resultado, haré más cantidad para hacer ese café bombón, o bizcochos, o helados, que con este calorcito, todavía da gusto comerse uno. La próxima prueba será con sacarina en polvo, ya os contaré.

Lo sé, lo sé, por más light que la quiera disfrazar, sigue siendo una bombaaaaaa, jajajajajaja.

Ingredientes (para 250 gr. aproximadamente):

100 gr. de leche desnatada en polvo
150 gr. de azúcar blanca
75 gr. de agua

Preparación:

1.- Ponemos en el vaso de la thermomix todos los ingredientes y programamos 10 minutos, temperatura 90º y velocidad 3.

2.- Vaciamos el contenido en un tarro de cristal y dejamos enfriar.

3.- Una vez que esté frío, lo metemos en la nevera.