Cada vez más, soy fan de la carne de pavo. Tierna y menos grasa, ideal para la dieta. Podemos acompañarlos de ensalada, verdura, ... y a los que no están a dieta les podéis poner de guarnición patatas, tanto fritas como cocidas.
Ingredientes (para 6 personas):
harina
aceite
una cebolla mediana (yo puse de la que me hago congelada)
dos dientes de ajo
una cucharada de pimentón dulce
agua
una pastilla de caldo de carne
Preparación:
1.- Cortamos los solomillos a medallones y los sellamos con harina. Reservamos.
2.- En una sartén ponemos aceite para sofreír la cebolla, que previamente hemos picado, a fuego medio.
3.- Pelamos los ajos y los hacemos a láminas y los volcamos en la sartén, para que se doren.
4.- Cuando el sofrito esté dorado, echamos la cucharada de pimentón y rehogamos, hasta que este bien mezclado.
5.- Añadimos ahora los medallones de pavo, con cuidado que no se deshagan y los mezclamos con el sofrito.
6.- Cuando estén rehogados, añadimos agua, que no rebase los medallones. (Si añadimos patatas chascadas, las incluimos en este momento para que se cuezan con la carne)
7.- Añadimos la pastilla de caldo y cocinamos a fuego lento, durante unos 15 minutos aproximadamente.