A veces los compro hechos por pereza de no hacerlos. Pero la verdad, es que son sencillos de hacer y el sabor es distinto, aunque la lámina de hojaldre se compre. No se porqué.
Con los recortes que quedan, suelo hacer bocaditos de coca de mollitos, o pongo queso, o jamón o anchoas, etc. y ya tengo otra tapita de aperitivo.
Ingredientes (para 6 unidades):
Dos láminas de hojaldre
Utensilios:
Aros de emplatar de dos tamaños (uno más grande que el otro). Si no tenemos aros, pues utilizaremos vasos de distintos tamaños.
Preparación:
1.- Extendemos la lámina de hojaldre y precalentamos el horno a 200º.
2.- Cortamos la lámina primero con uno de los aros o vasos más grandes y hacemos los 18 círculos enteros.
3.- Reservamos 6 de ellos. Al resto de los círculos, les hacemos un hueco con el aro más pequeño.
4.- Montamos el volaván, poniendo de base el círculo sin agujero, que previamente hemos pinchado con un tenedor (para que no suba el hojaldre). Encima de ese círculo, pondremos los otros dos que tienen un hueco en el medio.
5.- Horneamos de 10 a 15 minutos a 200º, función arriba y abajo. Cuando hallan subido y estén dorados, los sacamos del horno y los dejamos enfriar.
