Desde que me han pasado un poco de masa madre, estoy haciendo un pan espectacular. La verdad es que cambia mucho, me gusta la textura y lo que más me gusta es lo que dura. Aún pasando un par de días, lo metes al horno o en el tostador y está tan crujiente cómo el primer día. Me la dieron hace dos meses y sigo manteniéndola día a día en un lugar fresco.
Por eso quiero compartir con vosotr@s esta receta que encontré en Directo al Paladar, porque con dos levados cortos sale un pan fantástico. Yo le suelo dar forma de coca, pero podéis dividirlo en porciones y hacer dos barras.
Ingredientes:
300 gr. de agua
15 gr. de sal
250 gr. de harina de fuerza
250 gr. de harina normal
150 gr. de masa madre
15 gr. de levadura prensada de panadería.
Preparación:
1.- Ponemos en el vaso de la thermomix los ingredientes por este orden, agua, sal, los dos tipos de harina y la masa madre. Programamos 7 minutos, velocidad espiga. Os aconsejo que sujetéis la thermomix porque da unos cuantos botes.
3.- En una superficie enharinada sacáis la masa. Veréis que está un poco pegajosa, por eso para trabajarla bien, estaría bien que os mojarais las manos con agua o un poco de aceite.
4.- Lo dejáis levar una media hora tapado con un paño y pasado ese tiempo, con las manos amasáis un par de minutos para sacarle el aire. Le dais la forma y la ponéis encima de un papel de hornear y la dejáis levar otros 30 minutos.
6.- Cuando termine el levado, veréis como la masa ha aumentado a mas del doble de su volumen. Es una maravilla. Si queréis con un cuchillo afilado, haced unos cortes en forma de cruz en el medio y espolvorear con un poco de harina por encima.
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